A UNA BELLA MUJER

Para la mujer que conocí
Pasado el medio día,
En la mejor hora de la tarde,
Cuando el sol alumbró
Mi rincón ensombrecido
Y abrigó las ventanas
Del tercer piso.
Cuando su cuerpo
Ya dio su fruto
Y sus ojos brillaban
Sobre su risa delatante;
Cuando caminábamos
Lentamente el mismo surco
Y sus labios me atrajeron
Como la fruta prohibida
De la historia.

Para ti tres obsequios:
Mi fantasma
Para que vele
Todos tus sueños
Y te acompañe cada instante
Por los senderos
Que no podemos transcurrir juntos.
Te regalo el eco de mi voz
Para que no dejes de escucharme
Aún en el silencio mudo;
Para que me sientas en la radio
En la calle y en el bus,
En la fiesta y en el acto.

Finalmente
Te regalo el cielo colombiano
Por si viajas y guardas gran distancia.
Miraras el azul del firmamento
Y lo convertirás en espejo gigantesco
Me miraras allá en el horizonte
Y sabrás que vivo en ti
Desde hoy y para siempre